Monseñor Ezzati da inicio a Misiones Solidarias Duoc UC

Como una gran fiesta de la solidaridad se vivió en el Santuario Nacional de Maipú, la ya tradicional Misa de Envío de las Misiones Solidarias de Duoc UC, donde alumnos, docentes y colaboradores, participaron de la Eucaristía, ansiosos por comenzar las misiones.La misa -presidida por el Arzobispo de Santiago, Monseñor Ricardo Ezzati, junto al Capellán General de Duoc UC, el Presbítero Cristián Castro y una decena de sacerdotes y seminaristas- dio inicio al viaje que mil 300 miembros de nuestra Institución comenzaron para dirigirse a las 22 zonas de las diócesis de Villarrica, Osorno y Puerto Montt.“Este verano hemos querido llegar a más y nuevos lugares de misión, como son las comunas de Hualaihué (Hornopirén) y Maullín. Muchas de las zonas a visitar son de difícil acceso y en algunos casos, nunca han recibido jóvenes misioneros que acompañen la vida de fe de sus familias, por eso nuestro proyecto es una gran bendición, pero también una gran responsabilidad”, comentó Juan Carlos Silva, Coordinador General de las Misiones Solidarias Duoc UC.  Este verano, nuestros misioneros se pondrán al servicio de las parroquias de Puerto Octay, Loncoche, Fresia, Angelmó, Hornopirén, Calbuco, Carelmapu y Maullín,  realizando su aporte a través de las visitas a las familias, para compartir la vida y la alegría del Evangelio. Asimismo desarrollarán un total de 125 proyectos solidarios, como la construcción, reparación y pintura de plazas, capillas, sedes sociales, entre otros; y la realización de 98 capacitaciones y talleres,  según las distintas carreras de estudio de los alumnos, quienes ponen tanto su fe, como sus conocimientos adquiridos en Duoc UC al servicio de la Iglesia.“Sientan que el Señor va con ustedes”Durante la misa de envío, Monseñor Ricardo Ezzati se mostró alegre con el compromiso de los jóvenes de Duoc UC con la misión:“Que hermoso es descubrir que en nuestra patria hay jóvenes que tienen un profundo sentido de la vida, que han descubierto que la juventud es un tesoro, que adquiere mayor consistencia, felicidad, densidad en la medida que la vida se descubra como un don que se puede compartir”, comentó a los presentes que escuchaban atentos.Inspirado en el Evangelio de la multiplicación de los panesse dirigió a ellos con palabras de ánimo: “…ese muchacho, que solotenía tres panes y cinco peces, tuvo la audacia de ponerlos en las manos de Jesús, y Jesús multiplicó los panes y los peces, ese es el milagro que Jesús realizará también en cada uno de ustedes…, pongan en las manos de Jesús lo que son y lo que tienen, y se darán cuenta que al final de la misión mucha gente se habrá alimentado con su fe, con su testimonio de vida cristiana”.Los misioneros dieron por terminada la jornada reflejando su alegría en una foto junto a nuestro Arzobispo en la explanada del Templo Nacional,  concluyendo así la Eucaristía y dirigiéndose a los 25 buses que los llevarían sus destinos de misión.VER AQUÍ MÁS NOTICIAS DE MISIONES 2014